El lío con echar
Echo de menos
el viento aullador del mar,
que se ha puesto sobre mi pecho
y me deja casi respirar.
Echo de menos
el sol invasor del tiempo,
que se ha extendido sobre mi piel
y vive dentro mi cuerpo.
Echo de menos
el día poseedor de horas,
que se ha hecho cargo sobre mi ser
y me trae mejoras.
Echo de menos
la noche calmante de almas,
que me ha invadido entera
y me lleva entre sus palmas.
Por eso te pido:
Échame fuera,
échame a llorar,
échame tu encanto,
que tanto
me lo quiero llevar.
Échame de nuevo
échame a gritar,
échame el llanto,
que tanto
no lo puedo dejar.
Échame la vida,
échame adentro,
quédate conmigo,
hasta que te encuentro.